Todos las ramas de la industria automotriz se contrajeron en septiembre, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). A tasa anual la producción cayó 5.48 por ciento, la exportación lo hizo en 13.06 por ciento y las ventas en el mercado interno se redujeron en 22.79 por ciento, detalló.
En conferencia de prensa, los líderes del sector automotriz dieron por hecho que ningún subsector librará los efectos de la pandemia, pero el impacto será distinto. Las ventas en el mercado interno se advierten como el rubro que más decrecerá.
Fausto Cuevas, director general de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), detalló que en producción se espera una caída anual en un rango de 23.6 a 28.1 por ciento. De enero a septiembre la caída reportada por el Inegi es de 29.64 por ciento.
En exportación el rango de contracción previsto por la industria va de 23.8 a 27.8 por ciento; mientras los registros oficiales advierten de una reducción de 31.14 por ciento también en los primeros tres trimestres del año.
En la producción de autopartes, Oscar Albin, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), dijo que se espera una caída anual de 21 por ciento este año. La perspectiva en este sector ha aumentado mes a mes porque depende de la demanda de vehículos en Estados Unidos.
“No estaremos gozando de los mejores años, 2018 y 2019”, pero la recuperación será más rápida de lo que se estimó al inicio del confinamiento, dado que los relevos de modelo, la demanda rezagada y la recuperación de inventario están empujando este sector. “Mientras siga el optimismo en el mercado de Estados Unidos, las fábricas seguirán produciendo”, puntualizó.
En ventas, Guillermo Rosales, director general de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), agregó que se esperan una caída anual del 28.3 por ciento. Con los datos reportados hasta septiembre, la contracción en este subsector es de 30.48 por ciento anual.
De acuerdo con Cuevas y Albin, por el momento los niveles de producción están cerca de recuperar los niveles previos a la pandemia. De la capacidad instalada, las plantas están operando ya a más de 80 por ciento con restricciones mínimas en cada estado.
Por otro lado, los líderes del sector mostraron su respaldo al Acuerdo de Inversión en Infraestructura que firmaron el gobierno federal y las cúpulas empresariales el 5 de octubre pasado. Subrayaron que es positivo, pero mostraron reservas al recalcar que esperan que el acuerdo se concrete en obras.
Sobre las auditorías que alista el Servicio de Administración Tributaria (SAT) para revisar a la industria automotriz en búsqueda de ingenierías fiscales para reducir la tasa efectiva de tributación, Cuevas declaró que la autoridad puede ejercer su atribución en cualquier momento, pero “no hay por parte de las empresas asociadas a la AMIA una mala práctica, en general en la industria automotriz”, zanjó.